UNIVERSIDAD AUTONOMA DE BAJA CALIFORNIA
HISTORIA DEL ARTE IV
Mtro. ROBERTO ROSIQUE
Universidad Autónoma de Baja California
Escuela de Artes – Plásticas – Tijuana
LAND ART
Armenta Acosta Trixie.
Historia del arte IV
Profr. Roberto Rosique
29 de mayo 2011
Land Art
---arte en conexión con la Tierra---
El último siglo del ámbito artístico provocó la amplia extensión de los medios para expresarse artísticamente, dando lugar al Land Art, o arte de la tierra. Este arte sin duda, no se aleja de la reflexión que todas las corrientes y estilos han cumplido, el aspecto de cambiar o dejar en un punto de reflexión a los espectadores sobre la existencia humana o del mundo visible e invisible. Por supuesto influye aquí la inquietud humana sobre su relación con la naturaleza, y el land art, hace su parte.
El Land Art es un arte que consta de obras que se elaboran en el medio natural, a través de, por lo menos en un principio, materiales naturales, por el contrario, completamente contrastantes procurando ser inofensivos al medio ambiente. Básicamente, el punto principal del Land art es intervenir la superficie de la Tierra artísticamente, incluyendo estructuras de grandes tamaños, para quedarse visible a comparación de los amplios terrenos que se utilizan.
La mayoría de estas intervenciones a la naturaleza, se hacen en lugares alejados a la ciudad, para que sea un espacio libre de intervenciones posteriores humanas a lo máximo posible, como en las orillas de un río, en un lago, en mares incluso, o desiertos, por mencionar algunos.
Por las mismas condiciones estas obras regularmente duran poco tiempo, al ser producto del lento consumo de la misma naturaleza.
Basándose en la arquitectura antigua o en sitios sagrados como “Stonehenge”, las enormes piedras colosales apiladas en las tierras de Amesbury, Inglaterra, se interviene la naturaleza con un sentido artístico. Con un mínimo de elementos expresivos, figuras básicas como círculos, líneas, triángulos y cuadrados, el artista trasmite sus reflexiones sobre la relación del ser humano con la naturaleza, mostrando al espectador la inmensidad de ésta, a través de obras efímeras, que son destruidas por el paso del tiempo, la lluvia o la erosión del terreno.
El Land art comienza en los años setentas, principalmente en Norteamérica y Europa, donde los artistas buscan algo más que intervenir museos y galerías, después del minimalismo, donde en algunos casos se fue saliendo de los museos pero a pequeña escala, la obra no era de tal tamaño ni estaba tan alejado de la intervención humana, pudiendo estar en la calle, jardines, lugares urbanos, donde el espectador no se esforzaba tanto para encontrarlo o para poder apreciarlo.
El Land art se iba más allá, se iba a las lejanías de la ciudad para encontrar lugares puros o vírgenes de la naturaleza, volviéndose poco a poco más fuerte la unión del artista-naturaleza, cada vez más cercana, más de lo que se había logrado anteriormente, y más de lo que se ha logrado hasta la fecha. Las obras se iban a tamaños monumentales, para que embonara perfectamente el tamaño de la obra y el tamaño del soporte que es la naturaleza. De manera contraria, la obra no se apreciaría si fuera de dos metros por dos metros, en un soporte de kilómetros.
El soporte natural que utilizaban era cualquier tipo de ambiente natural, de ésta forma no se tenía que tener un fondo decorativo, siendo la naturaleza ambiente suficiente para llenar a cualquier hora y en cualquier condición, el aspecto estético de la obra. Éste ambiente puede ser la ribera de un lago, montañas, grandes plantíos, etc. Se puede mencionar a varios artistas importantes como Robert Smithson, Michael Heizer, Nils Udo, Richard Long, que utilizaban materiales naturales; Christo, Jeanne-Claude, Walter de María, Susumu Shingu, que utilizaban materiales que por ser artificiales, contrastaban en el medio; Robert Morris, Douglas Hollis, Eberhard Eckerle, Nancy Holt, que utilizaban las fuerzas directas del universo como el uso de los solsticios para sus obras de arte.
El espectador se tenía que esforzar un poco más tomando largos viajes para llegar al lugar de la obra, pero quienes lo hacían eran pocos; gran parte del público no lograba conocer la obra en persona, la conocía solamente con el registro fotográfico o fílmico, mapas, bocetos o partes de la misma obra como pequeñas rocas, y en algunos casos transmitidos por televisión, limitando así el contorno comercial al ser éstas las únicas formas en que los compradores o coleccionistas privados podían adquirirlas, o incluso no adquirirlas materialmente, sino adquirir la experiencia de haber conocido la obra en persona y posiblemente haber interactuado con ella, antes del deterioro si se incluye en su aspecto orgánico, o en el mero solsticio, por ejemplo, como en los casos de el Land art que se involucra con las fuerzas de los planetas y otros satélites. Sin embargo, el aspecto positivo de éste límite, es la exclusividad e incluso demostrando el verdadero interés de los compradores y no solamente comprar por comprar como un fetiche.
Aún así, resulta contradictorio el alejamiento de la obra de los museos y galerías, cuando vuelven después de la expedición a mostrarlas en museos y galerías para la venta de los mismos; si bien hay necesidad o participación del artista con los coleccionistas o vendedores, es incongruente el intento del alejamiento, cuando estando en ese punto lo incongruente sería venderlos en las calles porque entonces el Land art sería visto como arte callejero, vandalismo, atacantes de la madre Tierra o cosas del estilo, por no estar en una galería con los personajes de la alta sociedad vendiendo grandes obras conectadas con la naturaleza. Viéndolo de éste punto, de una manera positiva y no contradictoria, el Land art es una corriente que amplió en toda su extensión, hasta la fecha, al arte, porque siguen en las galerías, exposiciones y museos, además de estar interviniendo grandes espacios de la naturaleza fuera de la ciudad, ampliando el arte al mundo entero y no nada más a las ciudades.
Todo esto incluyendo que el artista, con el fin de no perjudicar al medio ambiente, realiza antes de su intervención, el ambiente, flora y fauna del mismo, para no perjudicar a ninguna especie en el proceso o con los materiales que se va a utilizar, principalmente por las condiciones en las que están muchas zonas en la actualidad con especies endémicas y en peligro de extinción, sea flora o fauna.
A manera de conclusión, el Land art es bastante afín a mí, por el hecho de sentirse conectados con la naturaleza. Siento que todas las personas aunque no realizaran ‘obras’ con regularidad, deberían de tener un aspecto en estar conectados con la naturaleza, así como los artistas precursores del Land art, es algo demasiado personal e inefable. Al realizar obras de este tipo, a pequeña o gran escala, es como si se tuviera una conversación con el ambiente donde se va a trabajar, primero para encontrar el lugar perfecto que casi habla diciéndole al artista “este espacio está habilitado e ideal para que lo intervengas”, obteniendo como producto final una perfecta unión artista-naturaleza como una fusión perfecta y casi indistinguible de la diferencia, haciéndose una sola como si fuera la naturaleza cooperativa con el artista, pareciendo incluso que la naturaleza le brinda las cosas al artista o se las da a un acceso fácil para que éste las utilice, totalmente compatibles produciendo algo realmente armonioso. Esta conversación e interacción artista-naturaleza, me recuerda a la infancia, cuando al cortar una flor una vez me dijeron que si le había pedido permiso, se me hizo una pregunta bastante extraña pero lo intenté en ese momento y es al igual que un fruto de un árbol, cuando el fruto todavía no está listo para su consumo, no se le brinda a las personas a menos que usen la fuerza, pero cuando ya está en su punto, pareciera que el árbol te lo regala.
Por otra parte, la afinidad que tengo con el Land art es por la manera orgánica de realizarlo, al no ser perjudicial para el medio, teniendo obviamente sus excepciones porque algunos artistas utilizan materiales como acero Inoxidable que estorbarán en el medio para toda la vida; pero al utilizar materiales que el mismo ambiente te proporciona, es absolutamente armonioso.
Fuentes y apoyo bibliográfico.-
Rodríguez, Itzel - http://sepiensa.org.mx/contenidos/l_landart/1.htm - 28 de mayo 2011
http://blogecoista.blogspot.com/2009/06/land-art_07.html - 29 de mayo 2011
HISTORIA DEL ARTE IV
Mtro. ROBERTO ROSIQUE
Universidad Autónoma de Baja California
Escuela de Artes – Plásticas – Tijuana
LAND ART
Armenta Acosta Trixie.
Historia del arte IV
Profr. Roberto Rosique
29 de mayo 2011
Land Art
---arte en conexión con la Tierra---
El último siglo del ámbito artístico provocó la amplia extensión de los medios para expresarse artísticamente, dando lugar al Land Art, o arte de la tierra. Este arte sin duda, no se aleja de la reflexión que todas las corrientes y estilos han cumplido, el aspecto de cambiar o dejar en un punto de reflexión a los espectadores sobre la existencia humana o del mundo visible e invisible. Por supuesto influye aquí la inquietud humana sobre su relación con la naturaleza, y el land art, hace su parte.
El Land Art es un arte que consta de obras que se elaboran en el medio natural, a través de, por lo menos en un principio, materiales naturales, por el contrario, completamente contrastantes procurando ser inofensivos al medio ambiente. Básicamente, el punto principal del Land art es intervenir la superficie de la Tierra artísticamente, incluyendo estructuras de grandes tamaños, para quedarse visible a comparación de los amplios terrenos que se utilizan.
La mayoría de estas intervenciones a la naturaleza, se hacen en lugares alejados a la ciudad, para que sea un espacio libre de intervenciones posteriores humanas a lo máximo posible, como en las orillas de un río, en un lago, en mares incluso, o desiertos, por mencionar algunos.
Por las mismas condiciones estas obras regularmente duran poco tiempo, al ser producto del lento consumo de la misma naturaleza.
Basándose en la arquitectura antigua o en sitios sagrados como “Stonehenge”, las enormes piedras colosales apiladas en las tierras de Amesbury, Inglaterra, se interviene la naturaleza con un sentido artístico. Con un mínimo de elementos expresivos, figuras básicas como círculos, líneas, triángulos y cuadrados, el artista trasmite sus reflexiones sobre la relación del ser humano con la naturaleza, mostrando al espectador la inmensidad de ésta, a través de obras efímeras, que son destruidas por el paso del tiempo, la lluvia o la erosión del terreno.
El Land art comienza en los años setentas, principalmente en Norteamérica y Europa, donde los artistas buscan algo más que intervenir museos y galerías, después del minimalismo, donde en algunos casos se fue saliendo de los museos pero a pequeña escala, la obra no era de tal tamaño ni estaba tan alejado de la intervención humana, pudiendo estar en la calle, jardines, lugares urbanos, donde el espectador no se esforzaba tanto para encontrarlo o para poder apreciarlo.
El Land art se iba más allá, se iba a las lejanías de la ciudad para encontrar lugares puros o vírgenes de la naturaleza, volviéndose poco a poco más fuerte la unión del artista-naturaleza, cada vez más cercana, más de lo que se había logrado anteriormente, y más de lo que se ha logrado hasta la fecha. Las obras se iban a tamaños monumentales, para que embonara perfectamente el tamaño de la obra y el tamaño del soporte que es la naturaleza. De manera contraria, la obra no se apreciaría si fuera de dos metros por dos metros, en un soporte de kilómetros.
El soporte natural que utilizaban era cualquier tipo de ambiente natural, de ésta forma no se tenía que tener un fondo decorativo, siendo la naturaleza ambiente suficiente para llenar a cualquier hora y en cualquier condición, el aspecto estético de la obra. Éste ambiente puede ser la ribera de un lago, montañas, grandes plantíos, etc. Se puede mencionar a varios artistas importantes como Robert Smithson, Michael Heizer, Nils Udo, Richard Long, que utilizaban materiales naturales; Christo, Jeanne-Claude, Walter de María, Susumu Shingu, que utilizaban materiales que por ser artificiales, contrastaban en el medio; Robert Morris, Douglas Hollis, Eberhard Eckerle, Nancy Holt, que utilizaban las fuerzas directas del universo como el uso de los solsticios para sus obras de arte.
El espectador se tenía que esforzar un poco más tomando largos viajes para llegar al lugar de la obra, pero quienes lo hacían eran pocos; gran parte del público no lograba conocer la obra en persona, la conocía solamente con el registro fotográfico o fílmico, mapas, bocetos o partes de la misma obra como pequeñas rocas, y en algunos casos transmitidos por televisión, limitando así el contorno comercial al ser éstas las únicas formas en que los compradores o coleccionistas privados podían adquirirlas, o incluso no adquirirlas materialmente, sino adquirir la experiencia de haber conocido la obra en persona y posiblemente haber interactuado con ella, antes del deterioro si se incluye en su aspecto orgánico, o en el mero solsticio, por ejemplo, como en los casos de el Land art que se involucra con las fuerzas de los planetas y otros satélites. Sin embargo, el aspecto positivo de éste límite, es la exclusividad e incluso demostrando el verdadero interés de los compradores y no solamente comprar por comprar como un fetiche.
Aún así, resulta contradictorio el alejamiento de la obra de los museos y galerías, cuando vuelven después de la expedición a mostrarlas en museos y galerías para la venta de los mismos; si bien hay necesidad o participación del artista con los coleccionistas o vendedores, es incongruente el intento del alejamiento, cuando estando en ese punto lo incongruente sería venderlos en las calles porque entonces el Land art sería visto como arte callejero, vandalismo, atacantes de la madre Tierra o cosas del estilo, por no estar en una galería con los personajes de la alta sociedad vendiendo grandes obras conectadas con la naturaleza. Viéndolo de éste punto, de una manera positiva y no contradictoria, el Land art es una corriente que amplió en toda su extensión, hasta la fecha, al arte, porque siguen en las galerías, exposiciones y museos, además de estar interviniendo grandes espacios de la naturaleza fuera de la ciudad, ampliando el arte al mundo entero y no nada más a las ciudades.
Todo esto incluyendo que el artista, con el fin de no perjudicar al medio ambiente, realiza antes de su intervención, el ambiente, flora y fauna del mismo, para no perjudicar a ninguna especie en el proceso o con los materiales que se va a utilizar, principalmente por las condiciones en las que están muchas zonas en la actualidad con especies endémicas y en peligro de extinción, sea flora o fauna.
A manera de conclusión, el Land art es bastante afín a mí, por el hecho de sentirse conectados con la naturaleza. Siento que todas las personas aunque no realizaran ‘obras’ con regularidad, deberían de tener un aspecto en estar conectados con la naturaleza, así como los artistas precursores del Land art, es algo demasiado personal e inefable. Al realizar obras de este tipo, a pequeña o gran escala, es como si se tuviera una conversación con el ambiente donde se va a trabajar, primero para encontrar el lugar perfecto que casi habla diciéndole al artista “este espacio está habilitado e ideal para que lo intervengas”, obteniendo como producto final una perfecta unión artista-naturaleza como una fusión perfecta y casi indistinguible de la diferencia, haciéndose una sola como si fuera la naturaleza cooperativa con el artista, pareciendo incluso que la naturaleza le brinda las cosas al artista o se las da a un acceso fácil para que éste las utilice, totalmente compatibles produciendo algo realmente armonioso. Esta conversación e interacción artista-naturaleza, me recuerda a la infancia, cuando al cortar una flor una vez me dijeron que si le había pedido permiso, se me hizo una pregunta bastante extraña pero lo intenté en ese momento y es al igual que un fruto de un árbol, cuando el fruto todavía no está listo para su consumo, no se le brinda a las personas a menos que usen la fuerza, pero cuando ya está en su punto, pareciera que el árbol te lo regala.
Por otra parte, la afinidad que tengo con el Land art es por la manera orgánica de realizarlo, al no ser perjudicial para el medio, teniendo obviamente sus excepciones porque algunos artistas utilizan materiales como acero Inoxidable que estorbarán en el medio para toda la vida; pero al utilizar materiales que el mismo ambiente te proporciona, es absolutamente armonioso.
Fuentes y apoyo bibliográfico.-
Rodríguez, Itzel - http://sepiensa.org.mx/contenidos/l_landart/1.htm - 28 de mayo 2011
http://blogecoista.blogspot.com/2009/06/land-art_07.html - 29 de mayo 2011
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